En la decoración interior influyen y participan muchos factores: los colores elegidos, las plantas, la decoración de la mesa, los adornos colgados del techo, paredes y lámparas, tarjetas de navidad y sobre todo el árbol y el belén. Colores: Los colores más usados son los que representan a la propia Navidad como son el verde, que en éste caso simboliza la eternidad y la vida; y el rojo, que aparentemente nos hace referencia a Papá Noel. Sin embargo si que hay una leyenda sobre el origen de Papa Noel que le describe como un ser bondadoso que hacía regalos y que desprendía una luz interior rojiza, como podéis leer en otro artículo de este mismo portal.
Éstos colores son los que van a adjudicar el adjetivo de navideño a todo objeto que los contenga de forma natural, como son las especies de plantas ya nombradas, pero en especial la planta de Pascua, que se coloca en los interiores navideños, sus grandes flores rojas y sus hojas de verde intenso desprenden la alegría y el espíritu de la navidad.